viernes, 3 de septiembre de 2010

Curiosidad

Plate 73 of the John Reeves Collection of Zoological Drawings from Canton, China, 1774-1856. (© The Natural History Museum, London).

Nunca he dibujado bien. Construyo objetos sobre líneas. No soy capaz de dibujar algo que estoy viendo. Pero me hubiera gustado.

Desde la primera vez que me hablaron de aquellos exploradores que realizaban largos viajes para adentrarse en lugares en los que nadie más había estado un escalofrío se arrastraba por mi columna vertebral como, paradójicamente, un deseo repentino. Jamás lo habría hecho solo, pero me hubiera gustado ser un joven biólogo dibujante en una expedición a lo nunca visto.

Se puede visitar en el Natural History Museum de Reino Unido una exposición de estos dibujos de plantas, animales y culturas aborígenes, aquellas primeras imágenes que pusieron a volar la fantasía de los más curiosos. También aquellos terribles animales que posteriormente la clase alta se dedicaría a cazar por popularidad.

"En particular, el museo expone en su casa una vasta colección de ilustraciones y dibujos, muchos de los cuales han sido originalmente producidos como una documentación científica de nuevas especies, nuevas culturas y otras cosas observadas durante expediciones. Sin embargo, están aclaradas (to clear), a parte de su valor histórico, estas obras de arte tambien tiene un inmenso valor estético. Ellas. Son. Bonitas."


Pero tampoco pasa nada por no saber dibujar, además, seguro que no habría quedado tan bien aquello de "el señor Fernández, supongo".