Acta Verbum, la aventura

Me pongo con la historia de Acta Verbum. Cuando termine: copio, pego, y me decís. En ese orden.

(Ahí va)

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Acta Verbum es una nueva forma de hacer periodismo.

Busca ser periodismo del clásico, del bueno, pero Internet lo revolucionó todo allá por 1993. Ya en 2010, cuando los jóvenes fundadores de la revista aún estaban cursando sus estudios de periodismo en la Universidad Rey Juan Carlos, no podían evitar reinventarlo a su manera y con la mejor intención.

Acta Verbum renace y se expande a la universidad pública española al completo, alimentado por la cultura libre, influenciado por las nuevas formas de comunicación, como el Open Data; apostando por el software libre y por las licencias de libre distribución Creative Commons. Acta Verbum nace en mitad de una profunda crisis de las grandes cabeceras nacionales e internacionales, pero también en los tiempos de mayor cantidad y posibilidades de acceso a la información de la Historia.

Lo que comenzó como una revista universitaria de información quincenal, con parcelas temáticas en busca de un periodismo especializado, ha evolucionado hacia un medio de comunicación universitaria. Obligado a dejar de lado su edición impresa, su constante evolución a través de la pantalla no impide dejar de lado el respeto por la tinta y el papel.

En su edición digital, el portal ActaVerbum.info ofrece diariamente contenidos divididos en función de las diferentes ramas de Conocimiento. Separar la información útil dirigida a estudiantes universitarios de la paja es nuestro desafío. Para ello, nuestras fuentes son siempre instituciones universitarias.

La revista digital, por otro lado, mantiene su naturaleza originaria. Los redactores y colaboradores de Acta Verbum realizan reportajes de análisis en torno a diversas temáticas: Universidad, Ciencia, Medio Ambiente, Cultura, Humor, Ficción... y muchos más contenidos de elaboración propia. Quién sabe si algún día podrá volver a “tocarse”.


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... Y me decís.

Hacking Retro

Intento mantenerme informado sobre noticias relacionadas con hacking, más que nada para no perderme entre tanta terminología. Otra cosa es que entienda bien los procesos y las partes de software susceptibles de ser hackeadas. No soy un experto, ni siquiera aprendiz, aunque de pequeño ya me interesaba el tema.

El primer sistema operativo que recuerdo es Windows 98. Ya por aquel entonces sabía que las contraseñas en esto de la informática no servían para mucho. Eran sólo una pieza más dentro de un puzzle-estrategia de seguridad. Cuando quería esconder algo, lo mejor era esconder bien el disquette...

La cuestión es que buceando por Un informático en el lado del mal, he encontrado este gif animado de cómo entrar en Windows 95 desde la ayuda de la impresora. Brutal.

No creo que vaya a probarlo, pero ilustra perfectamente que se pueden hacer cosas increíbles con un ordenador simplemente explorando nuevas rutas. Antes era más fácil. Ahora, cuanto más mayor, más miedo da explorar los límites de la máquina por si algo se pierde en el camino. Antes no hacían falta motivos, era una cuestión de curiosidad, ahora empieza a ser por seguridad. Ahora empiezo a asustarme de todo lo que se puede hacer desde cualquier otro ordenador.