jueves, 24 de marzo de 2011

Mona Lisa

(Gracias Libey)

Leonardo Da Vinci sigue siendo un maestro. No sólo por aplicar el módulo a la construcción de las máquinas, incluso a sus propios escritos... su destreza con el pincel es sencillamente eterna, ¿tendrán algo que ver las matemáticas?

Sobre la secuencia de Fibonacci, en mi teoría sobre su relación con el origen de la vida, he añadido un resumen para que no haya que leer toda la parrafada inmensa. No dispongo de los medios para confirmar mis hipótesis, pero ahí quedan.

Japón

El 11 de marzo, cuando Japón tembló, no sé por qué me invadió una extraña tranquilidad. En primer lugar, son los que están más preparados; cuando supe que había afectado a la central nuclear me temí lo peor... y todavía aún está por saber si serán capaces de evitar lo peor. Por ahora van bien, al menos ya tienen electricidad... Wikileaks alertó al gobierno japonés de que algo así podría suceder allá por 2008, tener centrales en el lado Este de la isla es un riesgo en sí mismo... pero eso no es lo importante ahora.

Es una catástrofe ocurra donde ocurra, el número de víctimas y desaparecidos siempre es más elevado de lo que uno es capaz de digerir... pero el mundo necesita conocer Japón.

Mi hermana me ha recomendado una entrada en el blog de Kirai, un español que lleva ya unos cuantos años viviendo en Japón. El título lo dice todo: La importancia de ser diversos. No tiene desperdicio, aún así quiero resaltar un fragmento:

"Según la metafora clásica de Adam Smith si los individuos persiguen su propio interés, una mano invisible ayudará automaticamente a los intereses de toda la sociedad.

Esta metáfora se sigue a rajatabla en las sociedades individualistas como los Estados Unidos donde la mayoría de las personas hacen las cosas por su propio beneficio consiguiendo a la larga beneficios para los consumidores y la sociedad.

En cambio en Japón, esta metáfora se aplica en el sentido contrario. Aquí la gente trabaja para servir a los consumidores y a la sociedad dando lo máximo de si mismos y de esta forma automáticamente obtienen beneficios para si mismos y consiguen sus objetivos individuales."

Exacto, eso es lo que me ha enseñado Japón.

Gran Bretaña es una isla convertida en un imperio poderoso, conquistador de los mares, en continua expansión, pero sin peligro ambiental. Japón también tuvo sus pinitos expansionistas en China... pero es una sociedad que se retroalimenta a sí misma. Saben que se necesita a todos para crecer protegidos de algo que no entiende de palabras ni políticas: temblores y tsunamis. Son la potencia mundial que más sabe del poder de la naturaleza, y eso es algo que no sé hasta qué punto se puede aprender. Sólo puede vivirse.

Ayer escribí un comentario sobre cómics... en Historia del Periodismo... Los superhéroes americanos luchan contra villanos por la seguridad de los civiles; los japoneses, juntos contra alienígenas.

Por casualidades de la vida pasé con mi familia un verano allí siendo niño. Ahora estoy seguro de que tengo que volver.

Multinacional

¿Es lógico que una empresa con deudas reparta beneficios?