La vida es una suma de habitaciones
Las habitaciones,
sin dueño, son de paredes secas,
limpias de recuerdos o miradas,
de tactos, de instrumentos.
Son cepos sin reflejos
ni recorridos,
ventanas
sin estrellas,
el paisaje nocturno son sólo puntos con retraso.
Lo dije.
Contar estrellas se haría pesado.
Son espacios sin fragilidad,
burbujas sin aire, pompas sin hidróxido de sodio,
restos de tierra bien adiestrados
sin raíces,
desconocidos,
vértices.
Te lo advertí,
nunca cesará el parpadeo.
Las habitaciones,
libres, son de paredes secas,
sin siervos, ajenas a los segundos,
a las curiosidades de la lascivia,
a los cielos redondos,
a los barcos de sueños
que soporten los números de esta irreductible tempestad de ausencias.
SpNt2005 - 5/4/10
Retiro lo dicho. Es demasiado mía.