viernes, 22 de octubre de 2010

Aniversario

vela, aniversario
Hace un año publiqué la primera entrada de este blog; tal que así:

"Anoche el destino decidió mecanografiar su sentencia sobre el toldo de la terraza. Un preludio del diluvio universal. O eso parecía. Porque estaba solo.

Las horas aprovecharon para modelar la cara de dios y no pudieron más que girar sobre su propio eje, declarando culpable de su encierro a cada una de las direcciones. No quise entrometerme en sus asuntos. Preferí poner la almohada sobre mi brazo. No sé si para impedir que un dios cualquiera durmiese conmigo o para recordar las noches de tormenta que pasamos juntos."

A punto de presentar el libro, a casi curso y medio de terminar la carrera, con las ideas aparentemente mucho más claras, desde la habitación grande, con una cama inmensa. Y feliz.

Aunque solo.

Hace un año decía que no tenía dinero para tener novia; no creo tener la suficiente imaginación como para hacer desaparecer las ganas de ir al cine, salir a cenar... y es algo que no puedo permitirme... Un año más tarde no tengo ni dinero ni tiempo. Lo dedico casi todo a proyectos, a prepararme para sobrevivir sin ella para seguir siendo yo cuando nos encontremos.

Hoy no publicaré nada más, es tu día para adentrarte en el pasado. Destripa tu silueta favorita.