De Las bellas banderas
Las bellas banderas
La blancura del sol en todo
como un fantasma que la historia
aprieta contra los párpados
con un pero de mármoles barrocos o románticos...
He deseado mi soledad.
Por un proceso monstruoso
que tal vez solo podría revelar
un sueño soñado dentro de otro sueño...
Y, finalmente, estoy solo.
Perdido en el pasado
(pues hay una única época en la vida del hombre).
De golpe mis amigos poetas
que comparten conmigo la brutal blancura
de estos años sesenta,
hombres y mujeres, solo un poco mayores
o más jóvenes, están ahí, al sol.
No he sabido tener la gracia
necesaria para estimarlos -en la sombra de una vida
que se desarrolla demasiado apegada
a la acedía radical de mi alma-.
Este poema es un recorte. Concretamente, este recorte forma parte de una larga espera.
Pier Paolo Pasolini: escritor