Se hace raro esto de pedir disculpas en tu propia casa, pero supongo que las mereces. Esto está un poco intermitente. No es mi intención, pero como ustedes comprenderán no se puede estar en todos sitios, aunque a fin de cuentas siga en el mismo, detrás de la pantallita.
Aprovecho un detonante feliz para dar señales de vida.
Me han concedido el segundo premio en el concurso de poesía de la Biblioteca de El Ejido con motivo del Día del Libro. El premio, además del orgullo y la satisfacción personal, han sido 120 euros en material literario.
No he tardado mucho en abalanzarme a la librería donde poder empezar a ejercer mi vale. Los primeros en caer han sido "El viejo y el mar", de Ernest Heminway (un clásico que aún no he leído) y "El arte de tener razón expuesta en 38 estratagemas", de Arthur Schopenhauer, un nombre muy sugerente. Sobre este último, decir que todavía tengo un libro suyo por leer y que "El arte de tener..." me lo he cargado en una noche. Es breve pero intenso. Próximamente copiaré y pegaré un fragmento que merece ser compartido con vosotros y almacenado en esta pseudo-memoria digital mía.
Como no había libros de poesía en la tienda, no he podido más que encargarlos, en este caso, "La memoria y los signos", de José Ángel Valente (un autor de libros que nunca se acaban), y "Cuadernos de Nueva York", de José Hierro. En el segundo caso, ya lo había comprado, leído y regalado; pero me gustó tanto que quiero volver a tenerlo, leerlo y, probablemente algún día, volver a regalarlo.
Sobre el certamen y demás. Ya sabrás que no soy muy dado yo a esto de concursar.
Presenté tres poesías: "Carne y hueso"; "Uno para dos"; y "La noche bajando al mar". Más que nada porque no sabía cuál presentar y la idea era abarcar varios temas; filosofía vital, metapoética y amorosa respectivamente. Las dos primeras poesías están publicadas aquí, y la primera aparece en mi primer libro. La última es "inédita" y la verdad es que me gusta bastante.
La ganadora fue "Carne y hueso"; escrita allá por 2010. Por una parte, me alegra mucho que haya ganado esa, porque significa que no pasa el tiempo por ella, o eso quiero pensar; y por otra, me hubiera gustado leer la inédita (que no sé si publicaré aquí o me reservaré para el próximo libro), para mi gusto es de las pocas poesías que he escrito amorosas (no de desamor) dulces sin empalagar, aunque tiene bastante de melancolía.
Intentaré colocar algunos libros (cambiarlos por su precio) a ver si puedo hacerme un empaste y sacar para el servidor de Acta Verbum, que me tiene bastante ocupado, especialmente desde que he empezado con Bibliom, un repositorio de citas bibliográficas. Son muchas universidades, muchos autores y muchas investigaciones, pero es lo que quiero hacer, aunque sea by the face.
Algún día (quiero pensar) ganaré un sueldo, sólo espero que no falte mucho.
No hay comentarios:
Publicar un comentario