lunes, 10 de enero de 2011

En construcción

Una madre y un hijo

Una madre asoma por la puerta,
él escribe.

Habla
y sigue escribiendo,
y no detiene el zumbido de los ojos,
la escucha
mientras escribe.

Una madre y un hijo aprendieron
con la misma máquina de escribir,
ella a hablar y él a escuchar.

Yo, a respirar.
Soy tornado
de fantasías y locuras,
soy niño,
me duele un ancla
tanto como a ti...

pero escribe,
y mamá no asoma
por la puerta.

Para
en cuanto las teclas
le queman la identidad,
se aleja
la luz.



SpNt2005 - 10/1/11

No hay comentarios:

Publicar un comentario